Potaje de vigilia
Se sirve tradicionalmente en los viernes de Cuaresma. Se trata de un potaje de bacalao, espinacas y garbanzos, ¡Una buena elección para combatir el frío!
Es muy típico consumir este plato en estas fechas debido a la prohibición religiosa de comer carne en este periodo. Se considera una de los platos más encontrados en la gastronomía de Semana Santa.
Uno de los principales ingredientes de este potaje es el bacalao que proviene de un salazón. Por esta razón, debe permanecer en remojo el día de antes. El potaje suele estar elaborado con garbanzos, alguna judía blanca, un manojo de espinacas y cebolla, ajos, aceite, pimentón y huevo duro. La preparación es muy simple y se suele servir con un huevo picado en cuartos sobre el plato.
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