Salsas
Si vas a utilizar o incluir en tu comida una salsa o aderezo lo mejor, sin duda, es prepararlo tu mismo. Lo ideal es utilizar para ello vinagre, limón o aceite de oliva, como ya te hemos explicado.
Esto quiere decir que huyas de las salsas y aderezos ya preparados, incluso los bajos en grasas. ¿El motivo? Pues las salsas ya preparadas tienen un alto contenido en fructosa y azúcares.
Así pues, aunque estos condimentos dan sabor a los platos, son en realidad una bomba de calorías que deberías dejar de lado. Y es que no hay nada mejor que las recetas caseras para cuidarse.
Vegetales
Sí, has leído bien, vegetales. Frente a lo que puedas pensar. Una dieta cargada de frutas y verduras no tiene por qué ser más sana que una que no los incluya. Aunque no lo creas, el consumo en exceso de fibra puede tener consecuencias negativas. Una de ellas es la hinchazón de estómago. Lo que puede derivar en la acumulación de gases y en estreñimiento. Como siempre decimos, tomar un alimento en cantidades excesivas no es beneficioso para nuestra salud.
Esto no implica que debamos eliminarlos de nuestra dieta, al contrario. Lo más adecuado es consumirlos en estado crudo o ligeramente cocidos para facilitar la digestión (te recomendamos algunas recetas). Aunque eso sí, recuerda hacerlo en cantidades normales.
Embutidos
Si estás a dieta, tu mejor amiga será la pechuga de pavo o pollo. Los especialistas recomiendan suprimir las carnes frías, tanto si son libres o bajas en grasa. Lo más recomendable siempre, si por ejemplo, lo consumes a la hora de desayunar, es cambiarlos o por los ya mencionados o por aceite y tomate.
Zumos
En este caso, la mejor opción siempre es optar por los naturales. Al contrario de lo que puedas pensar, los procesados incluyen (como norma general, aunque habrá excepciones) una gran cantidad de aditivos, concentrados y azúcares. Esto convierte a los zumos en uno de los 10 alimentos que más engordan. Sin saberlo, ingieres a diario pensando que son adecuados para la pérdida de peso.
Queso cottage
Este alimento es muy usado en las dietas debido a sus pocas calorías y su alto porcentaje en proteínas. No obstante, no puedes abusar de él porque es un producto alto en sodio. Por darte un ejemplo, consumir una tarrina de 900 gramos te aporta el 35 por ciento de todo el sodio que debes tomar en un día.
Pueden parecer muchas restricciones así de golpe. Sin embargo, te garantizo que si haces deporte y sigues una dieta equilibrada, en la prescindes de los 10 alimentos que más engordan, verás como bajas de peso de forma saludable.
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