Preparar sashimi. Si estás adentrándote en el impresionante mundo de la cocina japonesa éste es tu lugar. Te damos las claves para preparar sashimi en tres sencillos pasos. El sashimi es un exquisito plato japonés cuya base es el pescado crudo muy fresco. Por lo general se suele servir en pedazos rectangulares de 0,5 mm de ancho. Suele está acompañado de salsa de soja. También suele ser frecuente como acompañamiento el rábano daikon rallado o la hoja de shiso. La hoja de shiso es una hierba muy usada en la cocina que tiene un sabor similar a la menta.
Si la calidad del producto siempre es importante en nuestras recetas, aquí se convierte en un requisito fundamental. Tal es así que la frescura del pescado es la clave para garantizar el éxito del plato. Nos ponemos manos a la obra y vamos a preparar sashimi en tres pasos
Una forma sencilla de preparar sashimi
En primer lugar tienes que hacerte con el pescado. En los mercados japoneses suelen vender un producto de alta calidad. Los torozos ya están preparados para cortarlos y preparar sashimi. Pero tranquilos que si no tenéis un mercado japonés cerca de casa también podréis preparar sashimi. La mayor parte de supermercados ofrecen pescado adecuado para esta receta. Los más populares son caballa, atún, pargo, halibut, salmón, róbalo y anguila.
Cosas a tener en cuenta:
– Los cortes de pescados más grasos tienden a funcionar mejor.
– Con los pescados más grandes podemos hacer mejor los dados rectangulares que necesitamos para preparar el sashimi
– Es importantísimo asegurarnos de la calidad del producto al ser consumido en crudo. Para poder consumir el pescado en crudo debemos asegurarnos que ha sido congelado a la temperatura y durante el tiempo necesario.
En segundo lugar vamos ya a preparar el sashimi en sentido estricto. Para ello usamos un cuchillo bien afilado. Si el pescado no está cortado en filetes debemos hacerlo. Deben tener un grosor de 2 a 4 centímetros de ancho y de 1 a 2 centímetros de grosor. El pescado debe cortarse contra la veta en rebanadas de 0,5 milímetros de grosor. También puede cortarse en rebanadas más delgadas. Aquel sashimi que es tan delgado como una hoja de papel (kaku zukuri) suele presentarse acomodado en un patrón. Por cuestiones de sabor, textura e incluso higiene el pescado debe consumirse tan pronto como sea posible después de la preparación.
Por último ya es hora de servir nuestro sashimi. Para ello debemos acomodar algunas piezas en un plato y servirlo con palillos chinos y salsa de soja. A menudo se sirve con el rábano daikon rallado, jengibre encurtido, wasabi y/o una hoja de shiso como acompañamiento. Pese a ello todos estos elementos suelen incluirse como acompañamiento o decoración. Realmente lo único que necesita el sashimi es la salsa de soja.
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