Marlene Dietrich
Dietrich es uno de los mitos del Séptimo Arte y, al igual que en el caso de Crawford, también está incluida por el American Film Institute dentro de las diez mejores estrellas del cine femeninas de todos los tiempos. Marie Magdalene Dietrich nació en Alemana en 1901 en el seno de una familia acomodada (su padre era teniente de policía y su madre pertenecía a una importante saga de joyeros y relojeros).
Su debut en el mundo de la interpretación fue como corista en un cabaret en Alemania al que luego se le sumarían espectáculos de revista en Berlín. El Berlín de la vida nocturna y de la libertad de género con el auge del travestismo, marcó mucho el carácter y la estética de la actriz que siempre será recordada, entre otras muchas cosas, por ser una de las pioneras en la defensa de la libertad y la identidad sexual.
Su debut oficial se produjo en el año 1923 con una pequeña aparición en El pequeño Napoleón. En esto parece no haber unanimidad entre todos los historiadores. Algunos apuntan que la actriz ya había aparecido en varias películas alemanas desde el año 1919.
Alcanzó la fama al protagonizar la primera película europea sonora El ángel azul de Josef von Sternberg. Su papel como la cabaretera Lola-Lola que lleva a la perdición a un profesor respetable, causó auténtica sensación entre el público internacional. Fue el inicio de un mito que regalaría a la historia del cine interpretaciones tan icónicas con la de Sed de mal con su amigo Orson Welles.
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